Este fin de semana pasado hemos tenido un encuentro casi improvisado con la famosa parejita jugona, aprovechando que Jaén queda cerca y que nos conocimos más detenidamente en el pasado Festival de Córdoba. No pudieron bajar con nosotros la semana anterior a Málaga y decidimos reintentar de nuevo este interesante cónclave. De un carácter más social que lúdico, la quedada contó con la presencia de Pablo (de Lex Ludi Malacitana) y de los miembros de mi grupo de Córdoba Antonio El Nuevo y JGGarrido (y señora). Lo que hemos podido jugar ha sido escaso pero intenso:
1) LOUIS XIV:
Este juego de mayorías lo había probado hacía casi un año y me apetecía probarlo de nuevo. No me había impresionado mucho la primera vez, y temí que me estuviera hartando de euros secos y atemáticos, en los que cada uno va a lo suyo sin fijarse demasiado en lo que hacen los demás. Supuestamente, la interacción es más que casual, porque cuando te llega el turno has de adaptar tu estrategia en la ronda actual a las mayorías que se van forjando por los demás jugadores. Reconociendo que el juego sigue pareciéndome bueno, bien diseñado y técnicamente divertido, me entran unas ganas brutales de venderlo. Y mira que ocupa poco sitio el bendito, y que lo tengo tradumaquetadito todo él. Algo tiene sin embargo que me desmotiva a volverlo a sacar.
Por encima de esta extraña animadversión, sigo preguntándome por qué algunos euros aparentemente igual de secos siguen gustándome mucho, y otros no menos buenos como este me parecen aburridos y del montón...
Por encima de esta extraña animadversión, sigo preguntándome por qué algunos euros aparentemente igual de secos siguen gustándome mucho, y otros no menos buenos como este me parecen aburridos y del montón...
2) SPACE DEALER:
Este juego ha sido la auténtica sorpresa de este fin de semana. Nos lo enseñó Antonio El Nuevo (aunque yo también lo tengo, pero no he podido estrenarlo aún por tanto acúmulo de juegos vírgenes), aunque como éramos 5 en el momento de sacarlo, tuvimos que usar las dos copias que tenemos del juego (sólo hay que usar algunas cartas y piezas de tablero modular de la segunda copia). La mecánica es original y sencilla:
Tienes un planeta base, y una serie de cartas de inicio en mano, que se pueden construir. Para hacerlo, debes plantar la carta deseada junto a tu planeta (las cartas son de generadores, de minas, de tecnologías especiales, etc), y para representar que se está construyendo se le coloca un reloj de arena de 1 minuto encima, andando (cada jugador tiene dos relojes de estos, y posibilidades de conseguir un tercero). Cuando ese minuto llega a su fin, se considera que tal carta está "construida", con lo cual puede ser ubicada en la zona de tu planeta que pueda alojarla. Si por ejemplo representa un generador, su ubicación dará energía para abastecer a 2, 3 ó 4 otras cartas. Si se trata de una mina, cada vez que se coloca un reloj y termina el minuto, genera 1, 2 ó los 3 cubos que la mina es capaz de producir (y cuyo color viene representado en la propia carta de mina). Los cubos son almacenados y pueden ser cargados en tu nave espacial, siendo otra mecánica básica el enviar esos cubos a los planetas de los otros jugadores (o a otros planetas, estos neutrales), y ser entregados, proporcionando con ello puntos de victoria tanto al que entrega como al que recibe la entrega.
Con esta sencilla pero frenética mecánica de los relojes de arena, el juego se transforma en una carrera desenfrenada de 30 minutos exactos de duración (hay un CD de música generando melodías psicodélico-espaciales-lisérgicas muy adecuadas para el ambiente freak del acto), en la que de 3 a 8 jugadores menean cubos de colores por el tablero, se putean unos a otros (existen acciones de sabotaje que joden cartas u obligan a tu nave a regresar a tu planeta, por ejemplo), se ofrecen destinos de entrega que normalmente no interesan a nadie, y sobretodo, entrechocan sus brazos en el endiablado maremagnum de las acciones simultáneas, donde se mezclan lloros por el puteo, exclamaciones de horror por no haberse dado cuenta de que uno de los relojes lleva varios espantosos segundos parado sin que nadie se haya preocupado de buscarle otra ocupación, ofrecimientos en voz alta entremezclados (a lo mercadillo gitano), etc.
Lo bueno que tiene es que al ser tan frenético, y simultáneo, no existen los entreturnos, agilizando mucho la partida. Lo malo, que sólo dura media hora... Aunque siempre se puede repetir (espero que eso no dé lugar al efecto 7 Mierdas, jeje).
En definitiva: un juego fresco, divertido, estimulante, con puteo, incluso negociación, de gestión de recursos, y sobretodo original.
Estoy viendo la escena: los malagueños descubrirán el juego, se comprarán 15 copias, romperán el mercado, y hypearán el juego a mansalva...
Este juego ha sido la auténtica sorpresa de este fin de semana. Nos lo enseñó Antonio El Nuevo (aunque yo también lo tengo, pero no he podido estrenarlo aún por tanto acúmulo de juegos vírgenes), aunque como éramos 5 en el momento de sacarlo, tuvimos que usar las dos copias que tenemos del juego (sólo hay que usar algunas cartas y piezas de tablero modular de la segunda copia). La mecánica es original y sencilla:
Tienes un planeta base, y una serie de cartas de inicio en mano, que se pueden construir. Para hacerlo, debes plantar la carta deseada junto a tu planeta (las cartas son de generadores, de minas, de tecnologías especiales, etc), y para representar que se está construyendo se le coloca un reloj de arena de 1 minuto encima, andando (cada jugador tiene dos relojes de estos, y posibilidades de conseguir un tercero). Cuando ese minuto llega a su fin, se considera que tal carta está "construida", con lo cual puede ser ubicada en la zona de tu planeta que pueda alojarla. Si por ejemplo representa un generador, su ubicación dará energía para abastecer a 2, 3 ó 4 otras cartas. Si se trata de una mina, cada vez que se coloca un reloj y termina el minuto, genera 1, 2 ó los 3 cubos que la mina es capaz de producir (y cuyo color viene representado en la propia carta de mina). Los cubos son almacenados y pueden ser cargados en tu nave espacial, siendo otra mecánica básica el enviar esos cubos a los planetas de los otros jugadores (o a otros planetas, estos neutrales), y ser entregados, proporcionando con ello puntos de victoria tanto al que entrega como al que recibe la entrega.
Con esta sencilla pero frenética mecánica de los relojes de arena, el juego se transforma en una carrera desenfrenada de 30 minutos exactos de duración (hay un CD de música generando melodías psicodélico-espaciales-lisérgicas muy adecuadas para el ambiente freak del acto), en la que de 3 a 8 jugadores menean cubos de colores por el tablero, se putean unos a otros (existen acciones de sabotaje que joden cartas u obligan a tu nave a regresar a tu planeta, por ejemplo), se ofrecen destinos de entrega que normalmente no interesan a nadie, y sobretodo, entrechocan sus brazos en el endiablado maremagnum de las acciones simultáneas, donde se mezclan lloros por el puteo, exclamaciones de horror por no haberse dado cuenta de que uno de los relojes lleva varios espantosos segundos parado sin que nadie se haya preocupado de buscarle otra ocupación, ofrecimientos en voz alta entremezclados (a lo mercadillo gitano), etc.
Lo bueno que tiene es que al ser tan frenético, y simultáneo, no existen los entreturnos, agilizando mucho la partida. Lo malo, que sólo dura media hora... Aunque siempre se puede repetir (espero que eso no dé lugar al efecto 7 Mierdas, jeje).
En definitiva: un juego fresco, divertido, estimulante, con puteo, incluso negociación, de gestión de recursos, y sobretodo original.
Estoy viendo la escena: los malagueños descubrirán el juego, se comprarán 15 copias, romperán el mercado, y hypearán el juego a mansalva...
3) ASTEROYDS:
Terminamos la noche repitiendo este simplón y casi aburrido juego, que la verdad es que no me desagrada, pero del cual esperaba que en esta segunda oportunidad me gustara un poco más. Incluso no lo hice nada mal, teniendo muchas opciones de ganar como los demás. Pero un mayor control no conllevó desgraciadamente un mayor divertimento. Es un juego demasiado simple para mi gusto, demasiado "¿ya está? ¿esto es el juego? ufff". Y no me vale lo de "el modo avanzado cambia el juego completamente". Para mí eso es como decir que el cagarro ese del 7 Mierdas se convierte en un juegaco con las expansiones. ¡Vamos, hombre! Ambos son tan sólo fillercillos, juegos entretenidillos y graciosetes, sí, pero nada más. Al menos a mí me dejan con ganas de coger la Play3 y ponerme a pegarle tiros a los infectados yo solito, para olvidarme de este aburrimiento... Eso sí, a los demás les encantó, por lo que esta impresión debe ser sólo mía (y de Danielle, de la robopilingui, etc).
Terminamos la noche repitiendo este simplón y casi aburrido juego, que la verdad es que no me desagrada, pero del cual esperaba que en esta segunda oportunidad me gustara un poco más. Incluso no lo hice nada mal, teniendo muchas opciones de ganar como los demás. Pero un mayor control no conllevó desgraciadamente un mayor divertimento. Es un juego demasiado simple para mi gusto, demasiado "¿ya está? ¿esto es el juego? ufff". Y no me vale lo de "el modo avanzado cambia el juego completamente". Para mí eso es como decir que el cagarro ese del 7 Mierdas se convierte en un juegaco con las expansiones. ¡Vamos, hombre! Ambos son tan sólo fillercillos, juegos entretenidillos y graciosetes, sí, pero nada más. Al menos a mí me dejan con ganas de coger la Play3 y ponerme a pegarle tiros a los infectados yo solito, para olvidarme de este aburrimiento... Eso sí, a los demás les encantó, por lo que esta impresión debe ser sólo mía (y de Danielle, de la robopilingui, etc).
Y esto es lo poco que ha dado de sí esta quedada de sábado en la que hemos compaginado risas, comida, juegos intermedios y grata compañía.
La próxima vez toca en tierras giennenses. Nos vemos, parejita jugona ;)
La próxima vez toca en tierras giennenses. Nos vemos, parejita jugona ;)
"Estoy viendo la escena: los malagueños descubrirán el juego, se comprarán 15 copias, romperán el mercado, y hypearán el juego a mansalva..."
ResponderEliminarTú lo has dicho, amigo... xD
Y en el Asteroyds, lo que os pasa es que sois unos patatas! A mí la verdad es que me parece un juegaco, muy original y muy divertido, y con finales de lo más cachondo cuando el que va a ganar se olvida de poner el escudo y revienta y otras cosas así ;D
Sobre el Luis XIV, otro juegaco, y como tú dices, no sé como no te gusta, porque tiene interacción y mamoneo bueno, bastante más que otros euros.
Un saludo!
PD: Una entrada cortita, bien! :D
Joder, tío, no vendas el Asteroyds como más de lo que es. Está entretenido y tal, pero no es la bomba que todos esperan cuando leen vuestros comentarios entusiastas. El entusiasmo está guay en los juegos de mesa, ¡¡pero sin engañar!!
EliminarY el Louis XIV ya te digo que está guay: soy yo el que se aburre con él, pero el juego no tiene ningún problema. Ojalá me gustara más :(
Un abrazo.
Louis XIV? Juegazo! me dejas loco al leerte criticándolo. Pero al fin y al cabo ya estamos acostumbraos :P
ResponderEliminarSpace Dealer? Cagarro! (es broma, no lo he catao. Era sólo por imitarte! :P)
El Asteroyds me gustó, pero a secas. Como soy uno de los pocos (quizá el único) malagueño inmune al hype que genera Lex Ludi nisiquiera me lo pillé cnd se puso a tiro x 10 euros. Y me alegro. Pa empezar lo tiene en Málaga to cristo xDD, y dps eso, que me gustó, pero dps de q me lo vendieran como el oro y el moro vi que estaba graciosete, pero nada como para flipar.
Saludos!
¡Por fin alguien con sentido común! Jajaja, me alegro de que el Asteroyds sólo sea "graciosete" para ti. Ya está bien de comer el tarro con valoraciones infladas...
EliminarAhora en serio, el Space Dealer tenéis que probarlo. Le voy a dar hype en el blog, leñe, aprovechando que al parecer nadie más lo ha jugado... Eso sí, recordad que esto os lo dice un Troll adulto; quizá os parezca un cagarro monumental y yo esté aquí perdiendo el tiempo hablando bien de él.
Dios tio...como repartes a cada juego, he leído varias veces cagarros y mierdas xD. Menos mal que estabas en buena compañia, estaría curioso ver la visión de la parejita doble F sobre estos juegos :P. De esa lista el único que puede estar entretenido según leo es el Space Dealer.
ResponderEliminarUn saludo
No, tío. Seguro que le Louis XIV te parece todo un señor juegaco que te cagas. Yo lo que pasa es que me estoy hartando de euros secos en los que cada uno va a lo suyo. Este juego creo que debería haberlo probado mucho antes, y ahora sería un must have en mi colección (y si no lo vendo aún es porque me costó tela de trabajo "españolizar" las cartitas en mi casita, toda una tarde, jeej).
EliminarEl Asteroyds veo que aún no lo has probado: pues fijo que te gusta también, aunque espero que coincidas conmigo en que, aunque divertido, es un filler tan sólo... Uno de los aburridos, claro ;)
Un saludo.
PD: el día que no salgan dos o tres "cagarros" o algún "7 Mierdas" en este blog me habré vuelto mainstream y quizá sea más útil mi opinión para más gente, pero yo irremediablemente habré vendido mi alma al diablo. Si dejara de buscar la originalidad no tendría sentido seguir escribiendo para alabar los juegos famosos y despreciar los que no han logrado hacerse conocer tanto pero que están bastante bien como para que nadie los conozca...
Jajaja, estoy esperando el hype que viene del sur para joderme el bolsillo... one more time.
ResponderEliminarEsta muy bien que Space Dealer dure unos 30 min... pero viendo la mesa... que tiempo de setup tiene???
Saludos!
La verdad es que, teniendo en cuenta que éramos 5 y que tuvimos que sacar componentes de dos "Core Sets" (jeje) el setup duró casi lo mismo que la partida. Lo malo es que empezar una nueva partida puede llevar un rato prepararla, pero aún no lo he comprobado.
EliminarPero lo del setup es un mal menor, creo yo. ¡¡A probarlo si podéis!!
Un saludo ;)
Venga, como lo pide el gran Gudix, vamos a darle el gusto:
ResponderEliminarLouis XIV (o como el tema no importa una mierda): el juego es bastante seco... el contacto con los otros jugadores existe (aunque sea muy mínimo). Funciona bien (ve a por los blasones!!!) pero no es algo que te vuelva loco después de jugarlo.
Space Dealer (o como el caos es más divertido si le unes más caos): divertidísimo. Los primeros minutos son como: "Vaya! Qué facil!; tres relojes después estás gritando en pie en la mesa mirando tus relojes y vendiendo tus ciudades como prostituta fea en las calles de Holanda. Extremadamente estresante y divertido. Una pena que no sea para dos, pero de 3 a 4 (o más) es cachondísimo. Le pasa lo mismo que al 7Wonders, se juega sólo con los dos jugadores de tu lado. El setup es muy sencillo, sólo el tablero inicial, los tableros individuales y unas pocas cartas.
Asteroyds (o como alguien con carnet de coche puede tener tan mala orientación) Muy rápido, majísimo, muy chulo y no es tan azaroso como aparenta. Importa muchísimo más la velocidad cerebral para calcular TODOS los movimientos de las naves. Si eres rápido, tu nave es rápida. Si eres lento y torpe, ¡ASTOROIDE A LA VISTA! Si lo encontráis por 20 euros o menos, MERECE LA PENA (sobre todo si te gustan juegos como ricochet robots, set o Wicked Witches Way).
Ale, ya tenéis las dos versiones (Seldonita, la persona menos parecida en gustos a la parejita jugona. Y eso es muy bueno, así podeis ver los dos polos).
Un inmenso placer compartir mesa con tan grande jugador y jugadora (y jugadores terciarios). Lo único que fastidió la tarde fue la lluvia, pero al final llegamos perfectamente (casi en barca, pero perfectamente).
Hola. Gracias por describir los jueguitos y dar una visión no-Troll de los mismos. Coincido contigo en todo lo que has dicho (salvo en el entusiasmo por el Asteroyds, aunque lo describes muy bien).
EliminarA partir de ahora, cuando estrene un juego nuevo, le voy a pedir a la parejita jugona que escriba un breve comentario sobre su parecer sobre esos juegos (si los han jugado, claro). Así el blog tendría dos visiones muy interesantes: la que busca la originalidad y se caga en los juegos hypeados, y la de otras personas más objetivas que disfutan de los juegos sin dejarse llevar por los impulsos destructivos fruto de la misantropía lúdica... Podría salir un gran blo, ¿no?
Un abrazo; esperamos repetir pronto y que, por cortesía, nos caigan los chuzos de punta a nosotros esta vez.
Y sale el blasón de la casa de Lorena. Así que el juego es perfecto XD
ResponderEliminarEl Space Dealer dan bastantes ganas de probarlo viendo la pinta que tiene y siendo un fillercillo seguro que me gusta un montón.
ResponderEliminarLo del 7 Wonders ya es un abuso vamos jaj, si el juego está to bien.
El Asteroyds me lo enseñó Lethan y me decepcionó un poco cuando lo probé ya que me esperaba algo mas, de todas formas es algo original y gracioso de jugar, vaya lio las primeras partidas te comes asteroides por todos lados.
Que buenas quedadas, la próxima tendreis que venir para Cádiz no? jej
Pues fíjate, yo al Space Dealer no lo considero un filler, a pesar de la duraciuón. ¿Por qué? Porque aunque sólo dura media hora, hay que tomar mnuchas decisiones, gestionar recursos y "construir" tu imperio. A ver si lo logras probar y nos dices si te parece realmente un filler o no.
EliminarMe alegro de que el Asteroyds te pareciera un cagarro hypeado como a mí, jajaja. No, hombre, cagarro no es, pero que no es para taaaaaanto,sí es verdad y me alegro de no ser el único que lo piensa (al final no voy a ser tan Troll).
Antes yo viví una temporada en Algeciras, ¿sabes? Si hubiera empezado a jugar en ese momento hubiera conocido a muchos jugones de la zona; una pena. Y no, no descarto ir por allí en otra ocasión, y quedar contigo, con Gudix, con Suffo, con Sagres y con toda la gente buena que me queráis presentar ;)
Un saludo.
Ah, y el 7 Mierdas no es que sea malo, es que me obligaron a jugarlo MUCHO cuando salió y le cogí un asco tremendo porque no entendía cómo podía ser tan famoso y deseado un filler incontrolable y sin mecánicas apenas, que además vendió lo más grande y escaló hasta el puesto 7 de lo mejores juegos DEL MUNDO.
EliminarMalo no es, pero asco me da un rato.
Eso sí, una partidilla sí que jugaría de vez en cuando. Lo malo es que NUNCA es sólo una partidilla...
Bueno entonces tiene su pase, cuando me lo compré nadie queria jugar a otra cosa, mas de tres partidas seguidas cada quedada y sinceramente le cojí como tú un poquitín de asco. También me da bastante pereza jugarlo últimamente pero no me negaria.
EliminarEl space Dealer tal como lo mostrastes parecía un filler tipo 7 wonders, la verdad es que me deja muy intrigado ese juego tiene todas las papeletas de gustarme.
Asteroyds como te dije demasiado hypeado jajaja
En cuanto a quedar cualquier dia se lo decimos a Gudix y os veniis a jugar a mi local a jugar y nos pegamos el dia entero y la noche. Ya hablaré con Gudix.
Un saludo Seldonita.
Excelente lo de quedar. Buscaré la oportunidad y os lo haré saber llegado el momento.
EliminarRespecto de la polémica "7 Mierdas"... ¡¡Space Dealer no es un filler!! Y por tanto un señor juego, según mi humilde opinión (no como el mojón aquél).
Un saludo ;)