Juegos bastante repetidos últimamente

Desde que me mudé ha cambiado un poco el hábito de mis sesiones jueguiles, principalmente por el cambio en el grupo de juego. Antes yo era el que más juegos compraba y por tanto más ganas tenía de estrenar cosas nuevas cada vez, lo cual generaba sesiones interesantes pero también intensas para la mayoría, porque como era necesario aprenderse dos o tres juegos nuevos en cada ocasión, el esfuerzo de mis compañeros era en ocasiones significativo y eso yo no lo notaba (porque yo ya me los había estudiado antes).

Ahora, como todos compran, todos quieren estrenar, y eso implica repetir. También es verdad que aquí dedico menos tiempo a estudiar reglas (aunque aún lo pierdo bastante en esa actividad) y aprovecho para estrenar cosas que para la mayoría son nuevas pero que yo ya he jugado. En cualquier caso, estoy repitiendo mucho, y eso es algo que antes no hacía casi nunca. Con todos los juegos que tenía en mi colección (pensaba yo) ¿qué sentido tiene repetir, si de ese modo la mayoría se van a quedar precintados?

En esta nueva fase de la afición, por tanto, estoy disfrutando de repetir bastante juegos que antes sólo había jugado una vez para conocer mecánicas y valorarlos. Y entre ellos están sobretodo:

1) Hive:

He echado bastantes partidas, y el juego ha ganado mucho con la repetición. A todo el mundo al que se lo he presentado gusta, y casi todos quieren repetir partida. Es un excelente filler con el que rellenar ese tiempo que te queda disponible de sesión, o que sirve para esperar a que lleguen el resto de invitados. Aún no me he cansado de él, aunque ya estoy notando un pelín la repetición en las tácticas y estratégicas. Le daré un poco de carrete para pillarlo después con más ganas. Pero vamos, que amortizado está el jueguillo...

2) Carolus Magnus:

Obra maestra de los juegos intermedios, que gusta a todo el mundo al que se lo enseño, en mayor o menor medida. En cada partida sigue sorprendiéndome la frescura de sus mecánicas, lo acertado de su planteamiento, el reto mental que supone (tan atractivo para los que gustan de esa dificultad), y en definitiva el divertimento que me proporciona. Es uno de esos juegos que gana muchísimo con las repeticiones, y que no se quema rápido debido a lo difícil que puede llegar a ser dominarlo. Lo complicado a veces es encontrar a gente dispuesta a jugarlo, porque la verdad es que abstracto es, y hasta cierto punto quemacerebelos. Y tiene además ese pequeño factor azar que comentaba antes que no todo el mundo acepta (yo mismo estuve a punto de dar el juego por imposible, hasta que descubrí las variantes que lo disminuyen y las cuales estoy probando).

3) Troyes:

Nunca pensé que lo iba a jugar tanto, porque soy más dejar descansar este tipo de juegos para pillarlos con más ganas, pero ciertamente he notado que a pesar de mis temores, no se quema en absoluto y siempre tienes ganas de echar otra partida. Supongo que acusará algo de repetitividad cuando me sepa todas las cartas de actividad, por ejemplo, pero incluso así la combinación de esas cartas que sale en una partida es siempre diferente, por lo que los posibles combos que llevar a efecto también varían mucho de una partida a otra. Por cierto, yo apenas hacía combos de esos y el otro día empecé a ver posibilidades en ese sentido. Eso le dio al juego una dimensión mayor de la que ya tenía... También gana en rejugabilidad debido a los dados, que siempre resulta una mecánica fresca, divertida, y con ese punto de azar que da vidilla a las partidas a estos juegos.

4) Palastgefluster:

No sé por qué, pero siempre parece adecuado sacar este filler cuando nos reunimos 5 personas y no hay mucho tiempo para echar algo rápido. Suele gustar a todos (por el puteo que tiene, y por lo original de la mecánica, aunque la verdad es que casi siempre alguien se aburre porque no le llega nunca el turno y él quiere jugar...), y por tanto siempre es efectivo. Otros 6€ bien gastados y amortizados.

5) 7 Wonders:

No lo he repetido tanto como temí cuando lo descubrió mi nuevo grupo de juego, pero algunas partidillas sí he echado estos meses. Ya más por coña que en serio, he ido sembrado el terreno acerca de mi animadversión hacia él, y gracias a eso la amabilidad de mis compañeros ha hecho que no lo propongan demasiado en nuestras quedadas. Y como pueden jugarlo en otras ocasiones en las que yo no estoy, nadie sale perdiendo, jeje. A pesar de esto, la verdad es que el juego no me desagrada y no me importa echar alguna partidilla de vez en cuando. Reconozco que es más cabezonería y rabia personal por haberse hecho tan famoso y por haber vendido tanto cuando es tan sólo un filler (pero con precio de juego tocho), y no demasiado bueno, que te da eso sí un par de buenos momentos y que quemas en seguida, por simple y azaroso. Y he echado además unas cuantas partidas, quizá más cerca en el tiempo de lo debido. También me fastidia (y enormemente) que todo el mundo lo conozca pero que desconozca en cambio el anterior juego de su autor (Ghost Stories) que sí me parece un señor juego, digno de todos los elogios y merecedor de todo lo bueno que se hable de él, y que además tiene el honor de ser de los poquitos juegos cooperativos decentes que hay en el mercado (bajo mi humilde punto de vista). Otro juego que me parece muy bueno, también sencillote pero con más carnaza que esta basurilla, es:

6)Peloponnes:

Se trata de un civilizaciones lite que tampoco conoce ni Cristo y que ha pasado bastante desapercibido, el pobre. ¡¡Injusticia lúdica!! Lo conseguí en Philibert después de haber oído hablar de él por la BGG. Como me gustan tanto los juegos de construcción de tu civilización, me arriesgué y lo compré, sabiendo eso sí, que era sencillito, de subastas, y que duraba unos 45 minutos. Como no suelo tener juegos rápidos de ese estilo, hice la prueba y creo que salió bastante bien. El juego consta de una subasta en la que salen a puja una serie de losetas que después pasas a tu tablero personal de civilización. Eso hace que se modifiquen los marcadores de los diferentes recursos que tu población produce, y que se generen unos ingresos tanto en ciudadanos como en dinero en cada ronda.

Eso va aumentando tanto nuestros puntos de prestigio como nuestra población, y al final se miran esos dos números, y el que sea más bajo de los dos constituye los puntos de victoria que nuestra civilización ha alcanzado. Por el camino, una serie de desastres se van desencadenando, afectando a todos, y si no se ha previsto su llegada se sufren las consecuencias. En definitiva, un muy buen juego que estrené con pésimo éxito (debido a un error leyendo las reglas) y que he repetido mucho para comprobar (incluso a diferentes jugadores) si es bueno o no, llegando a la conclusión de que funciona mucho mejor al máximo de jugadores (5), por estar la puja de losetas más ajustada (sólo hay como máximo en este caso una loseta por persona). Completamente recomendable.

7) Dominion:

Lo juego mucho con mi hermano, a modo de relleno en nuestras sesiones, y gracias a eso a pasado de estar encerrado en la estantería a provocar de nuevo una sana gana de rejugarlo y ver nuevas estrategias, e incluso el deseo de comprar alguna expansión, para experimentar. Espero echar muchas partidas más a él y no quemarlo deprisa, que el juego no lo merece...

Estos son los que más repito, por circunstancias, pero también estoy repitiendo otros que ya probé en su momento (le estoy dando otra vuelta a la colección, jeje), dándome cuenta en esta segunda partida que me parecen más buenos incluso de lo que me parecieron al estrenarlos. Y es que por fin he perdido el reparo a repetir. Los juegos no se queman, ni te parecen repetitivos. Muy al contrario, profundizas en ellos, mejoras en tácticas y estrategias. Se abren ante ti, en definitiva.